Los incas por el Sur llegaron hasta Argentina. Las provincias de Tucumán, Catamarca, Salta y Jujuy están bordadas de vestigios quechuas. Cuando el vestigio se estudia se vuelve evidencia, pero es una explicación incompleta. Es cuando te rodeas de la piedras que acumulan tiempo sin tiempo, cuando hay margen para otras explicaciones. La lógica actual inevitablemente tergiversa, de ahí la necesidad de conexión con la perspectiva de nuestros antepasados. Esa lógica ancestral pasa por observar el universo para concluir en una interpretación mítica.